Aunque el sangrado o manchado vaginal puede aparecer en cualquier fase del embarazo es muy importante saber reconocer cuándo se puede convertir en un problema y actuar lo más rápidamente posible para prevenir complicaciones.
Prácticamente todas las mujeres manchan en algún momento del embarazo, pero ¿puede ser el aviso de un aborto espontáneo u otro problema grave que ponga en peligro la vida del bebé y de la madre?
Aquí explicaremos de una forma clara y sencilla todos los aspectos a tener en cuenta en esta situación.
¿Cómo diferenciar entre manchado y sangrado vaginal?
Es normal que cuando una mujer embarazada observa su ropa interior manchada de sangre salten todas las alarmas. Pero antes de entrar en pánico, hay que analizar fríamente todos y cada uno de los factores desencadenantes y determinar si se trata de un manchado o de un sangrado vaginal, de qué color es, de qué cantidad se trata, si se han tenido relaciones sexuales, etc. Toda esa información puede ser muy valiosa para el médico en el caso de tener que ir a urgencias.
El manchado se produce cuando la cantidad de sangre es muy poca, apenas unas gotas, y no llega a atravesar la ropa interior o el salvaslip, mientras que en el sangrado esta cantidad es mayor y traspasa la ropa llegando a necesitar incluso una compresa.
Pero si el sangrado es muy abundante y continuo estaríamos frente a una hemorragia que puede tener un origen mucho más preocupante que los dos casos anteriores, y sin duda alguna se necesitará de la asistencia sanitaria oportuna.
Causas de sangrado vaginal durante el embarazo
Te recomendamos leer: 10 cambios después del embarazo que verás en tu cuerpo
Durante los primeros tres meses de gestación es muy normal que surjan sangrados más o menos continuados de los que en principio no son para preocuparse. Aun así, es recomendable informar al médico para que esté al corriente de cualquier posible anomalía.
Por el contrario, cuando estos sangrados se dan en los meses más avanzados del embarazo, son mucho más preocupantes porque puede ser indicativos de que algo no va de forma normal en el desarrollo del periodo de gestación.
Para la mujer que está embarazada y sufre de pérdidas de sangre, o bien se quiere adelantar a esta situación, es importante conocer las posibles causas y estar preparada para cualquier imprevisto. Aquí presentamos las más comunes que se dan entre las mujeres gestantes:
- Implantación del óvulo fecundado: Cuando el embrión se fija en el endometrio de la matriz es muy común que se produzca un manchado o sangrado vaginal. Esto suele ocurrir durante el día 7 u 8 del desarrollo embrionario.
- Cambios hormonales: Desde el primer momento del embarazo, el cuerpo sufre una alteración en los niveles hormonales y aunque no se produce la menstruación, si puede que se den manchados en los días correspondientes al periodo.
- Relaciones sexuales: Es normal que se desarrollen pequeños sangrados vaginales tras mantener relaciones sexuales por lo que se recomiendo evitarlo en los días posteriores y mantener reposo.
- Infección: Prácticamente una de cada tres mujeres embarazas sufre en algún momento del periodo de gestación una infección vaginal. Estas pueden ser producidas por cándidas, tricomas, gonorrea, clamidias o herpes. Por lo general estas suelen provocar inflamación e irritación del cuello uterino dando lugar a hemorragias y olor intenso en el flujo vaginal.
- Aborto espontáneo: Desafortunadamente el porcentaje de abortos espontáneos suelen ser muy altos dentro de las primeras 20 semanas de gestación, y se produce cuando el bebé muere dentro del útero. En este caso el sangrado suele ser abundante acompañado de dolor abdominal intenso. A veces, tras una ecografía se comprueba que el corazón del bebé sigue latiendo y con reposo absoluto se consigue que el embarazo llegue a buen término.
- Aborto ectópico: Un embarazo ectópico se produce cuando el óvulo fecundado se implanta fuera de la matriz y empieza a crecer. En este caso, se produce una hemorragia vaginal y el embarazo no llega a término por los innumerables problemas para la madre. Si no se produce el aborto natural, se debe practicar un aborto programado.
- Insuficiencia cervical: Puede ocurrir que el cuello del útero se abra antes del parto y provoque un manchado o sangrado vaginal.
- Parto prematuro: Cuando un parto se adelanta a las 37 semanas de embarazo se considera un parto prematuro y en este caso comenzará el proceso normal de un parto con su consiguiente sangrado.
- Placenta previa: Existen casos en el que la placenta se dispone en la parte baja del útero ocupando todo el espacio del cuello uterino. En este caso también se puede producir un manchado o sangrado vaginal.
- Desprendimiento de placenta: Aunque es poco frecuente, a veces antes del parto, la placenta se separa de la pared del útero antes del parto provocando sangrado o hemorragia.
- Parto: Puede que el momento del parto ya haya llegado y por eso comienza a aparecer un poco de sangre acompañado de mucosidad que se conoce con el nombre de tapón mucoso. En este momento, el cuello del útero empieza a dilatarse para acabar abriéndose por completo para el instante del parto.
¿Qué hacer si se produce sangrado y estoy embarazada?
Te recomendamos leer: Dieta para bajar el colesterol
La pregunta más común que se hacen todas las futuras mamás es que qué hacer si se produce un sangrado durante el embarazo.
Hemos querido recoger unos pasos a seguir de forma general si esto llegase a ocurrir en cualquier momento del periodo de gestación. Pero en cualquier caso, y para evitar posibles complicaciones, lo mejor es acudir directamente al médico y despejar cualquier tipo de duda:
- Mantener la calma: Es quizás el punto más importante. Se requiere de control para recoger toda la información necesaria y así aportársela al médico actuando con la máxima precisión posible. Es necesario determinar el color de la sangre (marronácea, roja brillante, roja oscura), la cantidad de sangre perdida, el olor y la duración. Todo y cada uno de estos factores son necesarios para poder encontrar el origen del manchado.
- Mes de embarazo: Cuando se produce un sangrado hay que tener presente que no es lo mismo que este se de en los primeros meses como al final del embarazo. En los primeros meses, una hemorragia puede ser un aviso de un aborto mientras que en los últimos meses puede ser un adelanto del momento del parto, entre otras muchas posibilidades.
- Análisis de datos: Si el sangrado corresponde con un manchado, en principio no hay por qué preocuparse, pero si se trata de una mayor cantidad de sangre o hemorragia, presenta un color intenso, aparecen mareos y dolor abdominal o pélvico, es necesario acudir inmediatamente a urgencias. Es posible que se trate de una complicación grave del embarazo.
- No usar tampones: Es importante no taponar la vagina con el objeto de saber exactamente cómo es la sangre y si el sangrado se convierte en una hemorragia. Muchas mujeres intentan solventar el problema usando tampones, pero las consecuencias pueden ser nefastas.
- No realizar duchas vaginales: Las duchas vaginales pueden variar la el color y la cantidad de sangre que se está liberando. Es mejor dejar al cuerpo que actúe por sí solo y realice su proceso de limpieza de forma normal.
- No mantener relaciones sexuales: Esto podría ocasionar más sangrado. Es más común que se produzca manchado con las relaciones sexuales en los primeros meses de gestación, pero no se descarta que se puedan producir en cualquier mes del embarazo.
- Acudir al médico: Si el sangrado es intenso y está acompañado de dolor abdominal, de mareos y fiebre hay que acudir al centro hospitalario más cercano de inmediato y sin espera. Puede tratarse de algún tipo de complicación grave que puede interrumpir el embarazo o adelantar el parto. En cualquier caso, siempre es mejor la opinión de un profesional facultativo que nos dé una respuesta certera.
- Reposo: En la mayoría de los casos, la solución para controlar y detener el sangrado durante el embarazo es sencillamente el reposo. El médico, una vez valorado el estado de la embarazada y del embrión, determinará el tratamiento más idóneo para cada situación, y con seguridad todos y cada uno de ellos pasará por un periodo de descanso para la futura mamá.
- No hacer ejercicio intenso ni cargar pesos: Por muy bien que se desarrolle el embarazo es aconsejable no poner a prueba al cuerpo. Hay que aprovechar para realizar un ejercicio diario suave y moderado, y para que otros hagan las tareas más pesadas como ir a la compra o limpiar la casa.
Información de interés para el ginecólogo
Cuando una mujer embarazada llega a urgencias por sangrado vaginal lo primero que se le hace es una exploración completa para ver el estado del bebé y de la madre. Pero también es de vital importancia determinar la causa y las posibles complicaciones asociadas a dicha hemorragia. Para ello se llevará a cabo una valoración recogiendo toda la información que la pecienta pueda detallar. Para ello se valorará:
- El mes actual de gestación.
- La cantidad de sangre.
- El color del manchado (marronáceo, rojo brillante, rojo oscuro).
- El olor del sangrado.
- El estado de cansancio o debilidad.
- La presencia de dolor abdominal o en el vientre.
- La temperatura corporal.
- La última vez que tuvo relaciones sexuales.
- Alguna lesión o traumatismo sufrida en los últimos días.
- Las posibles situaciones de estrés.
Conclusión
Aunque el proceso de sangrado puede ser totalmente normal durante el embarazo, existen causas que pueden poner en peligro tu salud y la vida de tu bebé.
Ante un sangrado continuo, con color intenso, acompañado de dolor, cansancio y/o fiebre, no dudes en acudir al centro hospitalario de urgencias más cercano para descartar cualquier complicación y prevenir males mayores.
El tiempo es el mejor aliado en estos casos ya que se pueden solventar muchos problemas si se cogen en el origen y en la mayoría de los casos se corrigen con un poco de reposo.